El presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández Kirchner finalmente cenaron en la noche de este lunes 4 de julio en la Quinta de Olivos, tras un fin de semana de extrema tensión por la salida del ministro de Economía Martín Guzmán.

La titular del Senado se acercó a la Quinta de Olivos para mantener un extenso encuentro con el Jefe de Estado en medio de un fuerte hermetismo, con el objetivo de analizar la situación actual del Frente de Todos y el camino a seguir tras el último cambio clave en el Gabinete.

Cabe señalar que Fernández y CFK no se veían desde el pasado 3 de junio cuando se encontraron en el acto de los 100 años de YPF en Tecnópolis, día en el que Cristina le reclamó al Presidente en público que usara la lapicera para ir contra los sectores más concentrados de la economía.

Luego de aquel día volvieron a tomar distancia y recién retomaron contacto por teléfono en la noche del domingo, cuando el mandatario argentino tuvo que definir que Silvina Batakis iba a ser la reemplazante de Martín Guzmán en Economía. 

Fue ese llamado, en el que intervino Estela de Carlotto, el que hizo posible la cena de este lunes por la noche, ya que habían quedado en juntarse para hablar cara a cara. Durante la jornada había comenzado a circular la posibilidad de concretar el encuentro, aunque no se confirmó hasta que la ex mandataria ya se encontraba en la Quinta de Olivos, a donde llegó desde el Senado.

La relación entre Fernández y Cristina Kirchner venía dañada desde la derrota electoral de 2021 y fue empeorando en los últimos meses por diferencias con el rumbo de la economía y las posturas dispares sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La cena podría abrir una nueva etapa en la relación de la dupla presidencial que vino siendo muy difícil en los últimos meses.