La última elección provincial antes de las PASO del 13 de agosto quedó en manos de la coalición de JxC. En Chubut, con un resultado muy parejo, Ignacio “Nacho” Torres, de 35 años, sacó el 35,71% de los votos, menos de dos puntos por encima de los 34,11% de Luque, actual intendente de Comodoro Rivadavia, y será el próximo gobernador, sucediendo a Mariano Arcioni. La diferencia final ente Luque y Torres fue de menos de 5 mil votos: 116.432 a 111.203.

El final se empantanó luego de que, minutos antes de la medianoche, Luque no reconociera la diferencia indescontable en favor de su adversario y adujera que la distancia era, en base a su centro de cómputos partidario, de “800 votos” en su favor. “Es importante que aclaremos que con un electorado de más 350 mil personas, 800 votos son diferencias muy menores. No vamos a festejar una victoria a nivel provincial, vamos a esperar el recuento definitivo”, afirmó el candidato peronista, distanciado del espacio de Arcioni. Luque aclaró que recuento definitivo será en los próximos días: “Las urnas tendrán que llegar a la legislatura, luego contar, y a partir de ahí poder tener una definición respecto a esta elección que ha sido muy pareja y ajustada”. Luque informó que había tenido contacto con Eduardo “Wado” de Pedro, ministro del Interior y jefe de campaña de Sergio Massa.

Tweet de Horacio Rodríguez Larreta

La actitud de Luque hizo que Torres reaccionara rápidamente y, solo unos minutos después, apareció en el escenario de su espacio de campaña junto con las dos figuras nacionales de la interna de JxC: Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. Ambos habían compartido escenario la semana pasada durante la derrota de su candidato Rodrigo De Loredo en Córdoba capital y ayer buscaban una foto ganadora.

“Quieren confundir porque no pueden entender como después de 20 años, cuando nos ninguneaban, hablaban con sorna de que ‘este pibe no llega’, que no tienen experiencia, este pibe les demostró que después de 20 años, vamos a terminar con la desidia en la provincia”, resaltó eufórico Torres.

El actual senador se quejó de que Chubut hoy no cuenta con un código electoral y fue enfático para aclarar que el conteo se debía resolver en la misma jornada de escrutinio y no en la legislatura. “Hoy Chubut cambio su historia de una vez por todas”, exclamó Torres que hizo alarde de un amplio abanico político en su armado “ciudadano” con “radicales”, “del PRO”, “peronistas”, y “vecinalistas”. “Se les terminó la joda, señores. A partir de hoy vamos a ir por una provincia seria. Esta provincia necesita orden y sobre todo paz, por eso es triste ver, que por una vez, cuando tienen la oportunidad de decir ‘competimos y perdimos’ quieren confundir”, afirmó.

Luego de Torres, Larreta tomó la palabra y buscó nacionalizar la elección. También resaltó la unidad, en medio de la furia interna de la coalición: “Hoy los chubutenses se animaron a cambiar. Así como también se animaron en San Luis, en San Juan, en Santa Fe, en Chaco y en toda la Argentina que viene el cambio. El cambio viene siempre juntos, siempre juntos para ganarle al kirchnerismo”. El alcalde porteño señaló que en Chubut “consolidaron la unidad pero también sumaron”. “Ese es el camino”, enfatizó Larreta, mirando a las elecciones nacionales.

Bullrich felicitó a Torres y destacó que el pedido de recuento de votos del oficialismo chubutense se debió a que se sentían ya “derrotados”. “Hoy se terminó en Chubut el clientelismo, viene la institucionalidad, viene la ley”, reafirmó la titular del PRO en licencia. Y se metió de lleno en la interna nacional cuando sus simpatizantes coreaban “Patricia presidente”: “El 13 (de agosto) vamos a discutir con Larreta quien será presidente. Ahora vamos tranquilos, en el camino de la unidad”, afirmó entre risas. “Se terminó el kirchnerismo y el robo en Chubut. Se disfrazan de massistas, de peronistas razonables pero siempre son lo mismo. Siempre meten la mano en la lata. Junto con este equipo vamos a ayudar a Chubut para que salga adelante, gane quien gane”.

Torres basó su poder de fuego en tres ciudades para inclinar la balanza en su favor Esquel, Trelew y Rawson. Por su parte, Puerto Madryn y Comodoro Rivadavia fueron los núcleos de voto para el peronismo, lo que hizo que el resultado se definiera al final de la noche.

Una noche turbulenta que tuvo final feliz para Larreta y Bullrich, que prometen sacarse chispas en dos semanas.