Tras el choque de trenes de la formación San Martín en el barrio porteño de Palermo, el sindicato La Fraternidad denunció que hace días se venía trabajando sin la señalización correspondiente que fue robada pero no reemplazada. 

Según las autoridades del gremio, habían advertido a responsables de Trenes Argentinos sobre los peligros que podía implicar. 

El secretario General de La Fraternidad, Omar Maturano, alertó sobre el desfinanciamiento del sistema de ferrocarriles y la intención del Gobierno de privatizar la empresa. 

“Se viene trabajando hace diez días sin señalamiento debido a la degradación del ferrocarril y a la falta de seguridad porque se roban los cables de señalamiento”, exclamó. 

En lugar de reemplazar las señales, el dirigente sindical contó que “te notifican por un papel o te hacen señas con una bandera verde y vos avanzás”. 

"Acá parece que hubo un error humano, no sabemos todavía", adelantó Maturano en relación al choque en Palermo que dejó más de 60 heridos, 30 de ellos con código rojo. 

El secretario general remarcó que desde el Gobierno "no ponen los cables porque no hay plata, no hay repuestos porque no hay plata… es una empresa del Estado".

"Se roban los cables de señalamiento, los de alta tensión; si no se reponen los semáforos de las señales no funcionan. Hay una degradación total", añadió tajante. 

Omar Maturano, secretario general de La Fraternidad
Omar Maturano, secretario general de La Fraternidad

"Yo responsabilizo a los dueños del sistema y a los órganos de control, que son los que tienen que fijarse que funcione bien. Nosotros hicimos las denuncias del caso. Le dijimos al secretario de Transporte lo que hacía falta, no nos contestó debidamente, quedamos esperando", enfatizó.

Por otro lado, señaló que el problema "viene de larga data" y que los trabajadores "vamos desmantelando una locomotora de 8 o 10 años para poner en otra porque no hay repuestos".

"Está pasando en los privados como Metrovías, en el San Martín, en el Roca, el Sarmiento… hay coches casi abandonados, como 60 locomotoras en desguace. En todas las líneas se corre como día sábado porque no hay plata, no hay combustible, no hay cables", describió.

Finalmente, el dirigente advirtio que esa desinversión no es casual y que, en cambio, “es para vaciar la empresa, venderla a menos de lo que vale”.

“Si no hay inversión genuina, sea del gobierno o del capital privado, hasta diciembre podremos llegar a circular”, concluyó.