Mientras se debate el juicio político por el caso de los fondos coparticipables, Horacio Rosatti vuelve a enfrentar una gravísima acusación por su presunta actuación para proteger a un represor. El señalamiento vino de parte de una ex detenida-desaparecida durante la dictadura, quien sostuvo que el actual titular de la Corte Suprema operó para cubrir al hombre que la secuestró y torturó.

Así lo manifestó Patricia Isasa, secuestrada en julio de 1976, quien apuntó al cortesano en torno al juicio contra su secuestrador, Eduardo Ramos Campagnolo, miembro de la policía de Santa Fe. Tras la exoneración ya en democracia, el represor logró obtener un trabajo en la municipalidad. Isasa recordó que en 1998 realizó la denuncia correspondiente ante Rosatti, entonces intendente local, sosteniendo que ningún exonerado podía tener un trabajo municipal.

“El Dr. Rosatti me dijo que se iba a encargar del tema, pero con el tiempo comprobé que no hizo nada, ni siquiera abrió un sumario administrativo, para verificar los hechos por mi denunciados con documentación en mano. El Dr. Rosatti conoció los antecedentes de Ramos, y lo encubrió, manteniéndole el trabajo en la Municipalidad”, recordó Isasa.

Ese mismo año, la denunciante viajó a Madrid para testimoniar ante el juez Baltasar Garzón sobre su secuestro. Allí, el magistrado español pidió la detención de Ramos Campagnolo, aunque la detención se concretó recién cuando se reabrieron las causas en el país por crímenes de lesa humanidad, Ramos Campagnolo fue detenido y en 2005 le dieron la baja del municipio de Santa Fe.

Cabe recordar que Isasa  fue secuestrada por la policía de Santa Fe a la edad de 16 años, para enviarla a un campo de concentración, donde fue torturada y abusada sexualmente. Entre sus torturadores se encontraba el mencionado Ramos Campagnolo, conocido entre sus pares como “El Curro”.