La ola violeta pintó el país, y la provincia de Buenos Aires no fue la excepción. El peronismo de Unión por la Patria se impuso apenas en 29 municipios bonaerenses, de los cuales 25 corresponden al conurbano y a los que se le suman Berisso, Ensenada, Baradero y General Guido. Un resultado muy exiguo para las importantes expectativas que se habían generado en torno a la PBA como la posible locomotora de un eventual triunfo nacional. Frenada por el aluvión libertario, el voto opositor al Gobierno o la razón que fuera, la locomotora se quedó sin empuje en el tramo decisivo.

La Libertad Avanza se impuso en 109 distritos, que cubren prácticamente toda la superficie provincial de violeta con excepción de los cordones el conurbano. Las dudas en torno a la capacidad de fiscalización del armado libertario y su alianza con el PRO quedaron despejadas por una marea de votos que dejó a Javier Milei a las puertas incluso de imponerse en el total de la provincia.

La locomotora que no fue: Milei ganó 109 de los 135 municipios de la provincia

La diferencia a favor de Sergio Massa en la PBA fue de apenas 142.500 votos. Un punto y medio frente a los diez que debía obtener como mínimo UP para contrapesar los resultados que llegaran desde provincias como Córdoba, Mendoza o Santa Fe, donde se sabía que primaría el voto a Milei. La distancia fue incluso menor a la cosechada en 2015 por Daniel Scioli en el balotaje contra Mauricio Macri. Entonces, la ventaja fue de unos 220.000 votos y dos puntos y medio.

La única barrera de contención a la ola libertaria estuvo en el conurbano. Allí, con excepción de Morón, San Miguel, Vicente López, San Isidro, Escobar, Pilar Campara y Tigre, Massa se impuso en todos los distritos que componen el AMBA junto a la CABA. Casi como un guiño del destino, el municipio de Tigre, cuna de Massa y el Frente Renovador, volvió a serle esquivo al candidato de UP, que no logró ganar las PASO con Malena Galmarini y ayer cayó nuevamente derrotado en su propia tierra como ocurrió en elecciones anteriores.

La locomotora que no fue: Milei ganó 109 de los 135 municipios de la provincia

Lo populosos distritos de la Primera y la Tercera Sección electoral entregaron buenos resultados para Massa, pero su aporte se diluyó en un mapa nacional violeta que se impuso de forma inapelable. Algunos jefes comunales podrán exhibir sus números y ensanchar sus espaldas en el peronismo que se venga.

La Tercera exhibió números muy cercanos al 60-40 con el que el peronismo soñaba imponerse en toda la provincia, pero su aporte no alcanzó. En La Matanza, la estructura de Fernando Espinoza llevó la boleta de Massa a un categórico 61,19%, aportando 478.833 votos al candidato de UP. El Florencio Varela de Andrés Watson y Julio Pereyra fue otro de los distritos con un potente resultado: 63,14% y 157.084 votos. En Almirante Brown Massa punteó un 58,89% con 201.239 votos. El Quilmes de la reelecta Mayra Mendoza también aportó lo suyo, con 204.429 votos que marcaron un 56,63%. En Lomas de Zamora el peronismo volvió a hacer una gran elección, cosechando 227.514 votos y el 58,56%. Similares números en Lanús, con 157.320 votos y el 56,11%, y el Avellaneda de Jorge Ferraresi, que sumó 127.060 votos y el 57,60%.

La locomotora que no fue: Milei ganó 109 de los 135 municipios de la provincia

En la Primera Sección algunos distritos destacados fueron Merlo, donde Massa sacó casi el 60% y 183.842 votos; números muy similares al Moreno de Mariel Fernández, donde la boleta de UP marcó 59,50% con 158.939 votos; José C. Paz, con 100.499 votos y el 59,87%; o Malvinas Argentinas, donde Massa sacó 120.549 votos y el 56,66%.

Dentro de la Tercera Sección aunque más cerca de La Plata, también fueron contundentes los resultados en Berisso, donde Massa sacó el 56,43%, y el Ensenada de Mario Secco, que aportó a la cosecha de UP un categórico 62,20% en su distrito.

Así, en buena parte del conurbano el objetivo de sacarle más de 10 puntos a Milei y acercase a una diferencia de 20 se cumplió por parte de la estructura del peronismo. Sin embargo, la cosecha estuvo lejos de ser suficiente en el contraste con el resto de la provincia, donde Massa sólo pudo ganar con el 51,31% en Baradero y con el 51,37% en General Guido. La mínima diferencia en suelo bonaerense ni siquiera llegó a opacar la aplastante victoria libertaria a nivel nacional, que se extendió en 20 provincias y la CABA. Junto a PBA, Unión por la Patria apenas pudo imponerse en Santiago del Estero y Formosa.

La locomotora que no fue: Milei ganó 109 de los 135 municipios de la provincia

A la lectura del cierre del año electoral bonaerense hace falta volver a pasarla por la lupa de las generales. A pesar del estrepitoso fracaso en el balotaje, las generales dejaron a un peronismo gobernante en 85 distritos de la provincia, incluso recuperando municipios que hasta este año estaban en manos radicales o del PRO. A su vez, la participación provincial en la composición legislativa también favoreció al peronismo, que gracias a la gran elección en las generales quedó con un alto saldo en Diputados, ganó los dos Senadores y recuperó bancas en la Legislatura bonaerense. Ni que hablar de la arrolladora elección de Axel Kicillof, que desde el Sillón de Dardo Rocha quedará posicionado como el principal referente institucional del peronismo en lo que viene.

Todo ello será, sin embargo, territorio para la resistencia. Porque en el tramo final y metros de la línea de llegada, la locomotora bonaerense se quedó sin el empuje necesario y no pudo llevar al peronismo a una victoria que parecía imposible en la previa, que se complicó en agosto, se transformó en un sueño alcanzable en octubre, y terminó de esfumarse este domingo en las urnas del balotaje.