La producción industrial volvió a caer en agosto y se perdieron más puestos de trabajo
Un informe de la Unión Industrial Argentina reveló que el 36% de las empresas redujo su actividad
El apoyo de Estados Unidos al gobierno de Javier Milei y las negociaciones para un posible salvataje financiero por parte de la administración de Donald Trump, hicieron que repuntara el valor de los bonos argentinos, se estabilizara el dólar y bajara el riesgo país -al menos de forma temporal. Sin embargo, la actividad económica argentina sigue en picada. Mientras el mandatario argentino pide rescates financieros en Estados Unidos para afrontar los próximos vencimientos de deuda, la actividad industrial volvió a descender y el empleo sufre su peor caída.
Un informe del Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina reveló que la producción del sector tuvo una caída del 3% interanual en agosto. En tanto, el Monitor de Desempeño Industrial (MDI) se ubicó en 45,3 puntos, por debajo del umbral de expansión por decimotercer mes consecutivo.
El trabajo de la UIA confirmó entonces "la persistencia de un escenario industrial marcado por debilidad en la demanda y un horizonte de recuperación todavía incierto”.
En concreto, el 36,3% de las empresas del sector reportó una caída en su producción y un descenso del 43,5% en sus ventas, mientras que apenas el 18,6% indicó mejoras.
Además, los recortes de personal alcanzaron su nivel más alto. Además del fenómeno masivo de reducción de turnos, el 24,4% de las compañías disminuyó su personal.
La contracción del mercado laboral y la reducción de puestos de trabajo golpea con mayor intensidad a las micro y pequeñas empresas.
La caída de la demanda interna (40,1%), el impacto de la competencia con productos importados y el aumento de costos de producción, hace que la situación sea cada vez más difícil.
El informe de la UIA también reveló que el 44,1% de las empresas tuvo dificultades para cumplir con alguno de sus pagos (salarios, proveedores, compromisos financieros o impuestos) y que el 39,6% necesitó financiamiento bancario, aunque el 42,8% (principalmente pymes) no accedió al monto requerido.