La reunión que ayer mantuvieron Elisa Carrió, María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta en la quinta de la dirigente de la Coalición Cívica volvió a dejar repercusiones sobre el escenario político. Tras el encuentro donde también participaron Diego Santilli y Maximiliano Ferraro, cobra cada vez más fuerza la posibilidad de una alianza “moderada” frente al ala dura del PRO, de cara a las PASO.

Tal como adelantó ayer Diagonales, la noticia del encuentro que se concretó ayer en la residencia de Carrió en Exaltación de la Cruz volvió a reforzar las miradas sobre el viraje de una parte de Juntos por el Cambio, que apuesta a lograr un perfil de diálogo y paz con el oficialismo, en contraposición al sector más radicalizado y beligerante, encarnado hoy en Patricia Bullrich y Mauricio Macri.

Tras la reunión de ayer por la tarde, quedó en el aire la definición de “ponerle el cuerpo” a la campaña electoral que se viene, gesto que envió una fuerte señal a las discusiones internas de Cambiemos, donde todavía se debate cuál será el sector que conduzca a la coalición opositora.

Cabe destacar que han sido varias las señales enviadas desde el ala de la “moderación” hacia la esfera política. Días atrás, la propia Elisa Carrió se mostró a favor del proyecto oficial de postergar las elecciones PASO, medida que el oficialismo buscará tener aprobada lo antes posible.

Por su parte, Larreta intenta marcar terreno en busca de posicionarse como el mandatario que represente la oposición desde su rol en el Ejecutivo porteño, bastión del macrismo todavía en pie en un cargo de gestión. Mientras tanto, si bien no ha enviado definiciones concretas sobre las elecciones, María Eugenia Vidal también ha mandado gestos de sus intenciones de retornar a la arena política.

En tanto, el gesto de Carrió parece ubicar cada vez más cerca la posibilidad de sellar un acuerdo de la “moderación” de cara a unas elecciones Primarias que podrían definir el rumbo político de los próximos años, hacia un lado y otro de la grieta.