El  ministro de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, aseguró que los integrantes del tribunal no cederán ni cambiarán ante la marcha realizada la semana pasada por sectores más afines al oficialismo. "Quiero dejar en claro que la Corte no va a ceder a ninguna presión como nunca hemos cedido", aseguró. A su vez, negó la existencia del Lawfare en Argentina y habló de la mala imagen del Poder Judicial. 

"El derecho está para resolver los problemas de las personas; la función de la Corte Suprema no es discutir con ningún grupo político, sino resolver problemas concretos", señaló Lorenzetti en conversación con Radio Mitre. 

Y agregó que "la principal preocupación de los argentinos es cuando tienen un problema con la inseguridad, porque la robaron o asesinaron; el narcotráfico; los jubilados que no tienen adecuadamente su ingreso; o el derecho de propiedad".

"Desde 2004 hemos tenido muchísimas marchas, pero quiero dejar bien en claro para todos los que nos escuchan que la Corte no va a ceder a ninguna presión, como nunca hemos cedido", remarcó el ministro del máximo tribunal. 

A su vez, destacó el tener "una larga experiencia en esto y creo que lo mejor es el silencio y dedicarnos a nuestro trabajo". "No se puede aceptar que una persona que tiene una causa judicial, un procesamiento o ha cometido un delito y es investigado, pida que el juez que lo investiga renuncie: los jueces deben tener la estabilidad necesaria", manifestó.

Además, dijo ser un hombre que respeta las opiniones, pero que para él "no existe el Lawfare y no tengo ninguna duda al respecto; en la Corte Suprema siempre hemos tenido la misma conducta". 

"Tenemos la obligación de respetar nuestros precedentes y todos recordarán el conflicto que hubo con el tema de la democratización de la Justicia, que fue declarada inconstitucional: el Poder Judicial tiene que ser independiente... imagínese si dependiera de la voluntad política de cada momento", expresó.

Respecto a la mala imagen que tiene el Poder Judicial, no lo atribuyó a un problema de la Argentina. "El Poder Judicial en ningún país del mundo tiene buena imagen, porque su función no es buscar buena imagen. Si nosotros hicieramos populismo judicial, sacando sentencias que le gusten a la gente para mejorar las encuestas, sería trágico", evaluó.

Por último, dijo que hay "problemas muy concretos vinculados a jueces; el Poder Judicial en algunos casos se ha podido depurar, pero es necesario mejorar rápidamente. Se habla de Comodoro Py, pero ahí hay muchas vacantes y hay que tratar de cubrirlas rápidamente; la Corte no tiene esa posibilidad, se requiere que nos pongamos de acuerdo los poderes del Estado para mejorar".