Los trabajadores del Garrahan vuelven al paro y convocan a una marcha federal por la salud pública
El personal del hospital pediátrico realizará una medida de fuerza el próximo 10 de julio. Además, se sumará al paro sanitario a nivel nacional del 17.
Luego de la decisión del Gobierno nacional de cerrar las residencias pediátricas para convertirlas en un sistema de becas precarizadas y la negativa de aumentar los salarios de los trabajadores del Hospital Garrahan, el conflicto en el centro de salud se agrava.
Los trabajadores del hospital pediátrico realizarán una nueva medida de fuerza el próximo 10 de julio y se sumarán al paro nacional de salud del 17. Además, ese mismo día convocaron a una marcha federal a Plaza de Mayo, junto a la Federación de Sindicatos de Trabajadores de la Salud (FESINTRAS), “en respuesta a los reiterados ataques del Gobierno Nacional contra el Sistema Sanitario Público y sus trabajadores”.
Por su parte, el personal del Garrahan reclama un aumento salarial que permita recuperar su poder adquisitivo y un incremento de los fondos destinados al establecimiento médico. Como parte de un plan de lucha que ya sostienen hace varias semanas, las medidas de fuerza se decidieron luego de una nueva audiencia en la Secretaría de Trabajo, en la que no se presentó nadie de la administración de La Libertad Avanza.
Además de los dos paros, los trabajadores llamaron a una marcha federal desde el Congreso hacia la Plaza de Mayo para el jueves 17 de julio a las 16:30.
Por su parte, desde la Mesa Nacional de FESINTRAS se sumaron a la movilización y llamaron a un paro nacional para ese mismo día. La Federación denunció que el sector atraviesa “una crítica situación” provocada “por recortes sistemáticos de programas de salud, despidos masivos que afectan el funcionamiento de hospitales y centros de atención, el congelamiento salarial frente a una inflación creciente, la pérdida de derechos laborales históricos, y una profunda precarización del sistema de residencias”.
“Estamos frente a un ajuste brutal que no solo destruye las condiciones laborales sino que también pone en riesgo el acceso a la salud para millones de argentinos y argentinas”, advirtieron desde la conducción de FESINTRAS.