El presidente Mauricio Macri realizó su primera intervención en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) y se refirió al reclamo por la soberanía argentina de las islas Malvinas. Sobre el tema, el mandatario pidió "solucionar amigablemente la disputa de soberanía que tenemos por las islas Malvinas, Sándwich y Georgias del Sur".

"El diálogo y la solución pacífica de controversias es la piedra basal de la Argentina democrática", señaló Macri ante los presentes y remarcó que el gobierno argentino ha "dado muestras de interés en avanzar en nuestra relación bilateral, que debe ser mutuamente beneficiosa".

En su intervención oral que rondó los 15 minutos, el Presidente destacó el carácter "abierto" de la Argentina y celebró el regreso del país a los mercados internacionales de crédito, un día después de que llegara el Fondo Monetario Internacional (FMI) a auditar las cuentas del país tras diez años de ausencia.

Al referirse a Gran Bretaña, Macri deseó que Londres escuche las decenas de resoluciones de la ONU que instan a dialogar por la cuestión de la soberanía y dijo "confiamos en que será posible activar un mecanismo para solucionar definitivamente ese diferendo".

Los dichos del mandatario en la ONU se dan luego de que recibiera críticas por el comunicado conjunto que realizaran los dos países, sobre el compromiso de avanzar en vuelos a las islas, pesca y petróleo. El comunicado en cuestión fue criticado ya que al avanzar en acuerdos económicos se reconoce implícitamente la soberanía del otro, en un territorio que debería ser controlado por Argentina.

Acompañado por Susana Malcorra, Martín Lousteau, Marcos Peña y Juliana Awada, el Presidente brindó su discurso inaugural en la Asamblea General de las Naciones Unidas y además de referirse a la cuestión Malvinas, recordó los tres pilares de su campaña presidencial alcanzar la pobreza cero, combatir el narcotráfico y unir a los argentinos.