El ex presidente Mauricio Macri consideró que no fue reelecto, en principal medida, porque "generé expectativa en lo económico y no estuve a la altura". Luego se quejó por las dificultades que tuvo al desempeñarse como primer mandatario y allí dijo que desconectaba a las  19 horas todos los días  para "poner Netflix". 

"El Estado estaba totalmente quebrado y negué eso en la campaña por exceso de confianza", contó Macri tratando de explicar por qué no puso mayor énfasis en resaltar el pésimo balance que dejaba la segunda gestión de Cristina Fernández de Kirchner. Allí comenzó a practicar una especie de "autocrítica" de por qué perdió las elecciones donde buscaba ser reelegido.

En una entrevista con Juana Viale, Macri dijo que "ser presidente fue el honor más grande que tuve en mi vida", aunque señaló que "hubo noches que fueron terribles, a partir de 2018 que vino la sequía, yo iba trasmitiendo cada vez menos, porque fui perdiendo la capacidad de transmitir a partir de las 14 toneladas de piedras que nos tiraron en el Congreso".

"Ahí se quebró nuestro gobierno, se me quebró ahí la cabeza, fue increíble, yo intentaba a la noche cuando entraba a Olivos y gracias a la 'hechicera' Juliana, pero cerraba todo y me olvidaba, no miraba televisión, ponía Netflix y hasta el día siguiente trataba de reconstituirme", lanzó el ex presidente lo que generó indignación en las redes sociales. 

"Yo a las 7 u 8 de la noche me olvidaba, cerraba todo, ponía Netflix y hasta el otro día a las 7 de la mañana trataba de reconstituirme desde los afectos y la familia. El 2018 para mí fue muy duro, lo comparo con mi secuestro", sostuvo Macri, comparando su secuestro del 24 de agosto de 1991 con el fuego que acechaba su gobierno en su tercer año de mandato.