Tras un largo lapso de distancia, Mauricio Macri y Elisa Carrió mantuvieron una reunión a solas donde debatieron sobre el agitado escenario político, hoy signado por la crisis que atraviesa el oficialismo. Ambas figuras de la oposición se reunieron a cenar y pusieron el foco en la fuerte preocupación que hay por la falta de rumbo y la debilidad en que se ubica la cúpula del Gobierno luego de varios meses de internas desgastantes.

Según consignó el portal NA, la reunión de absoluta reserva entre Macri y Carrió en la localidad bonaerense de Acassuso. La reunión entre ambos se dio en pleno clima de tensión política, donde hacia un lado y otro de la grieta ya empiezan a calcular cuáles serán las consecuencias sociales y económicas del terreno que está dado en medio de la presente crisis.

Es que las idas y venidas dentro del Frente de Todos -cuyo estallido más reciente fue la renuncia de Martín Guzmán- provocó un nuevo cimbronazo económico en los mercados y el dólar paralelo ya comenzó a cotizar cerca de los 280 pesos, una cifra récord. Ahora, desde Juntos avistan un panorama complicado de cara al 2023 cuando intentarán jugarse el regreso al poder en las elecciones, aunque en medio de un país difícil.

Según trascendió, Carrió le planteó a Macri en la cena que a partir de agosto puede darse “un clima de absoluta desconfianza e inestabilidad” por la inflación y las divisiones en el Poder Ejecutivo. La salida de Guzmán, cabe recordar, dejó a Alberto Fernández ya en una extrema posición de vulnerabilidad, habiendo desmantelado la parte mayoritaria de su Gabinete original bajo presión del kirchnerismo y, en particular, de Cristina Fernández de Kirchner.

En tanto, hacia adentro de JxC las tensiones también se hacen sentir respecto del rumbo a seguir de cara a las elecciones. Cabe recordar que todavía no han terminado de limar las diferencias entre “halcones y palomas” en el armado opositor y Carrió podría jugar un papel importante a la hora de sentar posición entre unos u otros.

Tenemos que mostrar consistencia en asumir la Nación. Si estamos de acuerdo en un programa consistente, con políticos y técnicos preparados, no importa quién es el presidente. Tenemos que tener confianza y amistad política, no importa quién lidera la coalición o sea elegido presidente, lo importante es transmitir confianza sincera y compromiso con toda la Nación