En las últimas semanas Mar del Plata recibió la visita de los principales candidatos de la política nacional y provincial: Alberto Fernández, Cristina Fernández de Kirchner, Axel Kicillof, Roberto Lavagna y Juan Manuel Urtubey arribaron a la ciudad balnearia y realizaron actos y reuniones con vecinos y empresarios. A pocos días de la PASO, los máximos referentes de Juntos por el Cambio encabezarán un acto en la sede del Club Quilmes.

Una semana después de la presentación del libro Sinceramente que realizó Fernández de Kirchner, el presidente y la gobernadora harán un acto de campaña que contará con la presencia de los dos candidatos a intendente de este espacio. El diputado nacional Guillermo Montenegro y la concejal Vilma Baragiola serán los anfitriones del evento, aunque por ahora la idea es que no hagan uso de la palabra.

Desde Juntos por el Cambio resaltan la importancia de votar la boleta completa y eso será fundamental en la provincia de Buenos Aires. En el territorio bonaerense la imagen positiva de Vidal es superior a la de Macri, y el corte podría complejizar la elección para el presidente. Hay que tener en cuenta que Buenos Aires representa aproximadamente el 40% del padrón electoral, por lo cual lo que suceda en la provincia influirá notablemente en el resultado nacional.

En este marco, Macri y Vidal realizarán este acto en Mar del Plata, un distrito clave en el mapa provincial. La ciudad es el segundo municipio en cantidad de electores y fue un bastión en los triunfos de 2015 y 2017. En ambas ocasiones Cambiemos obtuvo más del 45% de los votos y desde el oficialismo aspiran a mantener esas cifras para contrarrestar lo que suceda en otros municipios importantes del conurbano.

Sin embargo, a pesar de los triunfos electorales, Mar del Plata no ha sido un buen ejemplo para la gestión de Cambiemos. En 2015 se impuso Carlos Arroyo y desde el inicio de su gestión se han generado conflictos con diversos sectores que disgustaron a la gobernadora. Frecuentemente Arroyo es noticia en los medios nacionales por sus declaraciones fuera de lugar: el año pasado propuso “mandar a alguna chica bonita a convencer empresarios que vengan a invertir a Mar del Plata", y hace pocos días dijo que ampliaría el servicio militar "para las mujeres y también para los discapacitados”, a quienes les daría “un motivo para vivir”. El jefe comunal se quedó solo y sin apoyo; en su reciente paso por Mar del Plata, Elisa Carrió sostuvo que Arroyo “fue un error de Cambiemos”.

Por este motivo, no sorprende que este año se le negara al intendente la posibilidad de competir dentro de Juntos por el Cambio. Así Arroyo se presentará a las PASO con boleta corta.

En este panorama, la interna de este espacio se definirá el 11 de agosto entre Guillermo Montenegro y Vilma Baragiola. El diputado nacional se convirtió en el referente del Pro en la ciudad y aparece como el elegido por la gobernadora. Por el otro lado, Vilma Baragiola armó una lista de concejales netamente radical para competir con Montenegro y aspira a imponerse con el apoyo y la unidad de su partido. A pesar de las diferencias, lo que tienen en común ambos candidatos es la crítica a la gestión de Arroyo y un discurso centrado en la necesidad de un cambio real.

Si bien en la previa al cierre de listas hubo algunos cruces entre ambos sectores, desde que comenzó formalmente la campaña han bajado los decibeles. La consigna es clara: la interna no debe dejar heridas severas que pongan en riesgo un posible triunfo en Mar del Plata. Quien salga derrotado deberá acompañar para fortalecer las candidaturas de Macri y, fundamentalmente, de Vidal.

En Mar del Plata, Juntos por el Cambio es el único espacio político que tendrá una interna reñida. Con Gustavo Pulti y Carlos Arroyo con boleta corta y Fernanda Raverta como candidata del Frente de Todos, lo que suceda entre Baragiola y Montenegro será lo más destacado de las PASO. Por ahora ambos sectores son cautos; “las encuestas nos dan dos puntos arriba”, dicen desde el radicalismo, “estamos creciendo y ya pasamos al frente” sostienen desde el entorno de Montenegro.

En esta disputa, el acto del próximo viernes podrá fijar la postura que toma Juntos por el Cambio en esta interna. Si bien muchos funcionarios y dirigentes nacionales optaron por sacarse fotos y aparecer con ambos candidatos, otros manifestaron públicamente su apoyo a Montenegro. Carrió sostuvo hace pocos días que le “alegra profundamente tener un candidato a intendente como Guillermo Montenegro en Mar del Plata". Por su parte, el secretario general de la Provincia, Fabián Perechodnik, expresó su satisfacción por la interna a nivel local, “ya que son dos muy buenos candidatos para Juntos por el Cambio”.

En este contexto Mauricio Macri y María Eugenia Vidal visitarán Mar del Plata una vez más. En agosto de 2016 el presidente y la gobernadora fueron escrachados en el barrio Belisario Roldán y el auto del primer mandatario fue apedreado. En aquel momento hubo fuertes críticas de los funcionarios nacionales y provinciales al dispositivo de seguridad diseñado por el gobierno municipal. La última vez que coincidieron Macri y vidal en la ciudad fue a fines de enero de este año, cuando visitaron el hospital Bernardo Houssay, que se encontraba en la última etapa de su remodelación.

Una vez más, Mar del Plata será sede de un acto con las principales figuras de la política nacional, ya pasaron los candidatos del Frente de Todos, ahora le toca el turno a los de Juntos por Cambio. Una foto de más, una sonrisa, un gesto afectuoso, todo estará bajo la lupa; la visita de Macri y Vidal seguramente dejará elementos para analizar en la interna entre Guillermo Montenegro y Vilma Baragiola.