Con el horizonte electoral cada vez más cerca, reina la incertidumbre respecto de quiénes serán los candidatos en las presidenciales del año próximo. Por el lado del oficialismo, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal echó por tierra la posibilidad de presentarse como candidata a presidenta y aseguró esta semana que Mauricio Macri irá por la reelección. A pesar de que no existe una confirmación oficial y que los temas de agenda económica obligan a la dirigencia política a postergar las definiciones, el jefe de Gabinete, Marcos Peña se muestra optimista y aseguró que están convencidos de que "Cambiemos va a ganar en 2019".

Entrevistado en TN, el hombre de la mesa chica del Presidente intentó trasmitir un mensaje de optimismo. "Le podemos decir a la clase media que va a continuar la posibilidad de acceder al crédito, que va a continuar la obra pública para que mejore su calidad de vida, que va a mejorar la inversión para que haya más puestos de trabajo", señaló.

Una vez más, y acorradalado por el avance de la inflación y la disparada del dólar, el oficialismo acude a su caballito de batalla: polarizar con la ex presidenta, Cristina Fernández de Kirchner. Dicha estrategia dio sus frutos en el pasado y pareciera ser una vez más a donde apunta Cambiemos. Peña, en este sentido, indicó que "cuando hablamos del pasado, hay un rostro que aparece y es el de Cristina Kirchner. Y está bien, ella está convencida de que dejó un país maravilloso... Está convencida de que fue un modelo mundial". Pero "la verdad es que no lo fue".

Para el Jefe de Gabinete, la realidad demuestra día a día "la mentira del pasado" y "el mejor futuro" con Cambiemos al frente del país.

Aún no se materializó el rechazo popular al veto del presidente Macri a la ley antitarifazo. Todo parece indicar que la semana próxima habrá novedades en cuanto a protestas se refiere, ya que los camioneros amenazan con paros ante la falta de acuerdo salarial, con un avismo entre el aumento exigido (27%) y lo ofrecido (15%). Docentes, metrodelegados, movimientos sociales y una Confederación General del Trabajo (CGT) que parece dormida serán clave en las semanas venideras. Allí comenzará un reclamo que amenaza con hacerse uno solo, claro que el Mundial de Rusia calmará las aguas y los reclamos se tomarán vacaciones hasta que se defina el futuro de la Selección.