Se acerca el momento de las urnas y los candidatos se lanzan al sprint final de campaña en medio de un contexto cargado de incertidumbre. Las principales incógnitas pasan hoy por cuán alto será el piso al que pueda llegar el peronismo el 22-O, y cuán alto es el techo al que puede aspirar Javier Milei en su ola ganadora. Del cruce de esas dos preguntas y sus respuestas saldrá la confirmación o no de una segunda vuelta que puede resetear todo escenario. Y las encuestas aportan sus elementos para los análisis de las últimas semanas de campaña.

El Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), un centro de estudios dirigido por el Doctor en Economía e investigador en comunicación política, Alfredo Serrano Mancilla, viene desarrollando un monitoreo de un conjunto de encuestas con el que elabora un promedio en torno a cómo avanza la intención de voto de cada uno de los principales aspirantes al Sillón de Rivadavia. En un contexto de enorme descreimiento para con las encuestas, el monitoreo de Celag tiene la particularidad de reunir alrededor de 26 mediciones y también el crédito de haber arrojado números previos muy cercanos a los resultados de las PASO.

En el oficialismo, por ejemplo, cayó como un balde de agua fría a poco tiempo de las urnas el promedio que publicó Celag según el cual el recopilado de los estudios entre junio y julio de varias encuestadoras daban a Massa en un 23,1% y a Grabois en 5,2%. El acierto se repitió para con Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, a quienes los promedios ubicaban en 13,2% y 19,2% respectivamente. Puntos más, puntos menos, el esquema reflejado por la sumatoria de las encuestas se cumplió bastante acertadamente el 13 de agosto.

Massa crece en las encuestas y se consolida un escenario de balotaje con Milei

En estos días se conoció una nueva entrega de ese promedio que cruza a unas 26 encuestas. En el mismo, Sergio Massa muestra una levantada de varios puntos, con un leve impasse en las primeras semanas de septiembre, que lo depositan segundo cómodo con 32,3%. A su vez, Javier Milei, que tocó un techo en la última semana de agosto de 38,6%, aparece cayendo hasta un 35,1%. Apenas tres puntos separarían en este escenario al libertario del candidato de UP. Por su parte, Patricia Bullrich se mantiene en un estancamiento del que no parece poder salir: el 14 de agosto su promedio estaba en 26 puntos y para finales de septiembre, punto de llegada de estas mediciones, se ubicaba en 26,5% y lejos de poder aspirar a meterse en un balotaje.

Las encuestadoras sobre las que se elaboraron esos promedios son Ágora, Analogías, Aresco, Atlas, CB, Celag, CEOP, CIRCUITOS, DC, Federico González, Giacobbe, Hugo Haime, Inteligencia Analítica, Opinaia Argentina, Opinion Lab, OPSA, Proyección, Synopsis, Tendencias y la UDESA.

Ese piso del 32%, que era al que Massa aspiraba a llegar en agosto, le estaría dando a UP la posibilidad cierta de meterse en un balotaje fundamentalmente por su relación con la otra variable determinante, el techo de Milei. Una encuesta presencial de Celag en mayo de este año ubicaba primero al libertario con 29 puntos, segundo al frente del peronismo con 26,1% y tercero a JxC con 24,6%. En septiembre, el centro de estudios repitió la encuesta presencial de 2509 casos efectivos y de distribución nacional. Como resultado, obtuvieron una intención de voto para Milei del 33,2%, de 32,2% para Massa y de 28,1% para Bullrich.

Massa crece en las encuestas y se consolida un escenario de balotaje con Milei

Pero el estudio aportó otros elementos interesantes para analizar cómo llegan los principales candidatos a las urnas y qué puede pasar el día después. “Milei tiene políticamente un piso sólido y un techo firme. Esto significa algo tan sencillo como que existe una parte de la ciudadanía argentina que lo apoya (30 % – 40 %) y otra parte que no lo apoya (60 % -70%)” escribió al respecto Serrano Mancilla. Para el centro de estudios, “Milei tiene un techo político rígido e innegociable” que se basa el rechazo de buena parte de la población a sus posturas fundamentales.

Por ejemplo, el estudio evidenció que, al consultar a los encuestados por la principal debilidad del libertario, “un 30,4 % responde que es violento; el 21,2 % que es chanta; el 19,7 % machista; solo el 28,7 % no dice nada en su contra”. Mientras que un 40% considera que sus ideas son interesantes y originales, el resto las considera irrealizables. Mientras un 37,7% lo considera una persona valiente y auténtica, el resto piensa que es inestable emocionalmente.

La opinión negativa sobre el candidato libertario asciende en este estudio hasta el 59,1%. Por otro lado, su prédica de que estamos en un escenario como el del 2001, algo que repitió en el debate de este domingo, es compartido sólo por un 33,2% de los encuestados mientras que el resto rechaza esa afirmación. Lo mismo sucede con la idea de que todos los políticos son una casta, algo a lo que adhiere el 37,2%, mientras que el resto se inclina por opciones con matices.

Massa crece en las encuestas y se consolida un escenario de balotaje con Milei

Desde otro punto de vista, el estudio de Celag también identificó que alrededor de un 60% de su muestra se manifestó a favor de cuestiones contra las cuales Milei predica: la estatización del Litio, mantener Aerolíneas Argentinas como una empresa pública, ponerle más impuestos a los ricos, o tener un Estado más activo en la distribución de tierras.

“¿Esto implicaría que este techo político sea su techo electoral? No. Porque, como bien sabemos, en algunas situaciones, cuando hay tres rivales y uno se descuelga, entonces, podría ocurrir que aparezca el voto útil” analizó Serrano Mancilla en torno a sus resultados, aunque no dejó de afirmar que “Milei tiene un techo político muy firme a pesar de sus fortalezas”.

¿Cómo se manifestará ese techo político de Milei en las urnas el 22-O? ¿Será un límite lo suficientemente rígido como para no permitirle un crecimiento tal que asegure una segunda vuelta? Si se da ese escenario, ¿hasta dónde podrá estirar su techo quien llegue a ese balotaje, eventualmente Sergio Massa, partiendo de los rechazos que genera el líder de La Libertad Avanza?

Quedan dos semanas para el día decisivo en el que todos los análisis previos pueden quedar en la nada. Pero lo cierto es que, hoy por hoy, el escenario no parece mostrar a un Milei despegando y, por el contrario, la solidez de los rechazos que genera se constituye en una esperanza para Unión por la Patria para llegar al balotaje. Y allí será otra historia.