En medio de uno de los escándalos más graves en lo que va del Gobierno libertario, este lunes el presidente Javier Milei rompió el silencio sobre las denuncias por las coimas de Karina Milei, develadas en un audio filtrado del ahora extitular de Discapacidad Diego Spagnuolo, pero solo atinó a blindar a su hermana y lavarse las manos sin mencionar en concreto las acusaciones de corrupción: "Es previsible en un año electoral. Los de enfrente quieren romper todo, son los argentinos de mal".

"Lo que estamos viviendo en un año electoral era absolutamente previsible porque esto es como el ajedrez: las negras también juegan. A este Gobierno no le falta política, el tema es que los de enfrente quieren romper todo, que es algo distinto. No les importan los argentinos de bien porque ellos son los argentinos de mal, que son los vividores y los que han destrozado este país", apuntó el primer mandatario en su discurso durante la inauguración del nuevo edificio de Corporación América, compañía donde trabajó por 15 años.

Milei llegó al evento acompañado por Karina Milei y procuró mostrarse cercano a su hermana y Secretaria General en medio de las fuertes acusaciones en su contra. Al respecto, alegó: "No me importa todo el daño que puedan hacer de acá al 7 de septiembre o hasta el 26 de octubre. Si di vuelta el déficit fiscal de 123 años en un mes, ¿ustedes creen que me voy a preocupar por lo que me van a hacer durante dos meses?".

En tanto, en otro tramo de la exposición, el Presidente se refirió a las recientes derrotas legislativas del oficialismo, entre ellas la del categórico rechazo al veto en Discapacidad que ocurrió en simultáneo a la difusión de los audios de Spagnuolo: "Los orcos del Congreso son destituyentes que buscan romper el programa económico. Apuestan por romper el país promoviendo leyes que buscan romper el equilibrio fiscal y apoyando barbaridades sin tener financiamiento".