La gira del presidente argentino Javier Milei en Estados Unidos no deja de ser noticia, aunque no por los motivos que le gustarían al líder libertario. Ayer, su fugaz aparición en el escenario de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) solo para regalarle una motosierra al multimillonario Elon Musk lo pintó como un comediante ante los ojos del mundo. Hoy, el jefe de Estado se superó y, durante su discurso en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), enloqueció porque escuchó un celular sonando en el público. Era el suyo.

El Presidente activó el modo avión en su gestión pero no en su propio dispositivo móvil. Tuvo que esperar hasta hoy para poder hablar ante alguien que quisiera escucharlo en Washington, adonde eligió recluirse por algunos días mientras el escándalo por la estafa cripto se profundiza en la Argentina y la Justicia desarrolla (con polémica de por medio) la investigación en su contra. Sin embargo, el economista volvió a quedar en evidencia debido a un particular “incidente” que lo sacó de sí y le hizo interrumpir su discurso.

X de Diagonales

Es que, de repente, el titular de La Libertad Avanza (LLA) fue sorprendido por un sonido en el público que seguramente le recordó por qué opta por realizar entrevistas grabadas en vez de en vivo. “Cómo sistemáticamente nos hemos alejado del paradigma liberal… Para… Digamos, convertir a la Argentina en una catástrofe…”, venía comentando el Presidente cuando, de fondo, empezó a oírse un ringtone. El audio descolocó al mandatario, que comenzó a balbucear; insólitamente, le tomó un momento identificar que el celular que sonaba era el suyo.

“Sí, está tremendo ese teléfono… ¿Es el mío?”, reconoció Milei. “Te están llamando”, le explicaron desde el público. Como es habitual, la situación desequilibró al Presidente, que reaccionó con improperios: “No, les cuento qué pasa… Hemos anunciado que íbamos a transmitir por mi canal de Instagram, y siempre hay un imbécil, malnacido, porque sabe que está interrumpiendo la charla”. Y sentenció: “Argentina es así, tiene un montón de cabezas de termo”.