El presidente Javier Milei no para de fogonear el enfrentamiento con un sector de la sociedad que ve peligrar sus derechos ante la política agresiva de ajuste. “El reclamo puede ser genuino, pero construido sobre una mentira", dijo el mandatario argentino respecto a la marcha universitaria. Respecto a la dirigencia que estuvo presente dijo que “muestran el miedo que me tienen, lo grande que soy respecto a ellos”. 

"Nosotros nunca dijimos que vamos a cerrar las universidades ni que le ibamos a quitar financiamiento. Lo único que pedimos y buscamos es que como las universidades públicas están siendo financiadas por los pagadores de impuestos, los números tienen que ser auditados”, explicó Milei en conversación con Radio Rivadavia. 

Y sobre esto planteó que "¿y quién no quiere ser auditado? Los ladrones no quieren ser auditados. Si los números fueran transparentes, podrían ser auditados. ¿Quién no quiere ser auditado? El que roba”.

A pesar de que fue una de las marchas más multitudinarias de los últimos años a nivel nacional, el Presidente dijo que fue una victoria para su gestión: "Lo que pasó ese día fue un triunfo político categórico de La Libertad Avanza. Y por eso en algunas encuestas no sólo no cayó mi imagen, sino que en algunas subió. Porque sirvió para ver de qué lado está cada uno”, manifestó. 

“Como no quieren ser auditados, arman una mentira sobre nuestras propuestas, sobre esa mentira arman una marcha, engañan a la sociedad y quedaron todos en evidencia. Ahí estaban todos los enemigos de la libertad”, aseguró.

Como si fuera poco dijo que esa marcha estudiantil fue “la reedición de la campaña del miedo". "Toman una causa noble y la prostituyen con un objetivo político. Y eso se ve en las caras de la marcha. Con los estudiantes estaban la CGT y Pablo Moyano… y la verdad que no los veo muy compatibles con eso. Estaba el ala progresista de la UCR, La Cámpora, (Axel) Kicillof y la provincia de Buenos Aires, el Frente Renovador y Massa, los piqueteros, todo el arco de la Izquierda… Cuando yo miro ahí, es la foto del tren fantasma”, manifestó. 

“Por lo menos tendrían que ser más vivos y variar las caras, para que uno no se dé cuenta. En el fondo muestran el miedo que me tienen, lo grande que soy respecto a ellos y lo poca cosa que son ellos respecto a mi. Porque se tuvieron que juntar todos para pelear con uno”, dijo en tono desafiante.