Patricia Bullrich despliega a sus agentes encubiertos para vigilar las redes sociales
A través de dos resoluciones publicadas en el Boletín Oficial, el Ministerio de Seguridad creó la figura de "reveladores digitales" y una escuela para los espías 2.0, que tendrán una identidad falsa con documentación oficial del RENAPER
El Ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich oficializó este martes el protocolo para vigilar las redes sociales con agentes encubiertos de las fuerzas federales que actuarán bajo una identidad falsa en el mundo digital, pero con documentación oficial emitida por el RENAPER.
La medida de implementó a través de la publicación de las resoluciones 828 y 829/2025 en el Boletín Oficial, que crearon la figura del “revelador digital”, una suerte de espía 2.0, y una escuela para formal especialmente a los agentes encubiertos que acturán en redes sociales.
Según la cartera que encabeza Patricia Bullrich, la fiscalización de redes sociales permitirá realizar investigaciones de delitos complejos como narcotráfico, trata de personas y grooming, entre otros. Sin embargo, en un contexto de creciente persecución a la militancia y a la oposición, crece la preocupación sobre el rol que cumplirán estos agentes digitales.
En mayo de este año, un grupo de relatores de Naciones Unidas expresó su “seria preocupación” ante “el deterioro grave de las libertades fundalmentales y del espacio cívico en la República Argentina desde diciembre de 2023”. La advertencia puso el foco justamente sobre el accionar de las fuerzas de seguridad y la represión desplegada por el Gobierno nacional ante cada manifestación.
Además, advirtió sobre “violaciones a la libertad de expresión, la libertad de reunión pacífica y asociación”, “detenciones arbitrarias” y “acciones que impiden la independencia judicial”.
En este contexto de retroceso de derechos y de la calidad institucional, el gobierno de Javier Milei puso en marcha un nuevo protocolo para el despliegue de “agentes encubiertos digitales” y “agentes reveladores digitales”.
Según la normativa, la intervención de los agentes digitales debe ser requerida por la Justicia. Para ello, se creará un "Registro de avatares" con identidades falsad y perfiles de usuarios ficticios que tendrán interacción con navegadores de la web para “brindar apoyo en las investigaciones penales”.
A pesar de que los agentes encubiertos tengan usuarios falsos, la identidad creada para ellos contrará con documentación oficial cargada en la base de datos del Registro Nacional de las Personas (Renaper). A su vez, a pesar de que el accionar de los espías 2.0 está limitado al mundo de las redes sociales, la normativa permite emitir la documentación física o digital respaldatoria para el usuario creado.