Tras la aprobación del mentado bono de 45.000 pesos por parte del Gobierno para paliar la difícil situación económica en los sectores más afectados por la inflación, las posturas fueron amplias desde el oficialismo. Mientras que sectores como el Frente Patria Grande celebraron el anuncio de Sergio Massa y ahora apuestan fuerte a ir por el Salario Básico Universal, también hubieron críticas hacia la iniciativa.

Fue Emilio Pérsico quien decidió salir al cruce de la medida, gesto que envió un fuerte mensaje no sólo a la esfera política sino también al conjunto de organizaciones sociales. Como referente del Movimiento Evita -y funcionario del Gobierno-, las palabras de Pérsico abren ahora un nuevo clima de tensión ante una medida destacada por figuras como Juan Grabois, otra de las grandes referencias de los movimientos sociales.

“Es difícil en la Argentina, con la mitad de la economía en negro, encontrar a los compañeros indigentes en una planilla de Excel”, dijo Pérsico en comunicación con Futurock y agregó: “Es más fácil pensar subsidios y creer que así se termina la pobreza. Todos los progresistas quieren sacar un subsidio cuando llegan al Estado”, señaló el dirigente y funcionario del ministerio de Desarrollo Social, ahora a cargo de Victoria Tolosa Paz.

Cabe recordar que el mentado bono fue tomado como un triunfo propio por la organización referenciada en Grabois y que posee sus bancas en Diputados dentro de una complicada convivencia dentro del Frente de Todos. “Para nosotros es una medida muy importante, fue nuestro principal planteo cuando asumió Massa, la necesidad de implementar medidas compensatorias para los sectores populares sabiendo que en un programa de estabilización también hay otras que benefician a otros sectores”, dijo a Diagonales el diputado Itaí Hagman, del Frente Patria Grande, en el marco del anuncio de Sergio Massa.

Federico Fagioli, otro de los Diputados del frente Patria Grande, le dijo a Diagonales que el bono “es una demanda que estábamos exigiendo desde los movimientos sociales, puntualmente una política que Juan Grabois impulsó y se sentó a hablar con quienes tenía que hablar para poder llevarla adelante y que, como ya dijimos muchas veces, contó con el acompañamiento de Cristina, que fue un motor fundamental para conseguir el anuncio que hoy está en vías de implementación”.  

En tanto, la expresión de Pérsico deja un sabor amargo respecto de la medida motorizada por Grabois y abre una grieta particular para el universo de los movimientos sociales, luego de 2022 donde las aguas estuvieron agitadas sobre los sectores que se mostraron más cercanos a la cúpula de Casa Rosada o al ala más combativa del kirchnerismo.