la espera de definiciones sobre la continuación de la causa, trascendió en las últimas horas la decisión de la Justicia de rechazar el pedido de Cristina Fernández de Kirchner de recusar a la jueza María Eugenia Capuchetti, quien se encuentra a cargo de la investigación por el intento de magnicidio cometido el pasado 1 de septiembre. En ese sentido, desde el Poder Judicial ratifican el rol de la magistrada en el caso.

Según consignó el portal Infobae, la Cámara Federal habría tomado la decisión este viernes, luego de que la Vicepresidenta demandara que se aparte a Capuchetti de la causa, por considerar que su accionar ralentizó el avance de la investigación y por no profundizar en pistas clave del caso.

En tanto, al mismo tiempo que la Justicia reafirmó a Capuchetti al frente de la causa, también se ordenó una serie de medidas que se deberán profundizar para esclarecer una de las pistas sobre la que apunta la querella y que salpica al diputado del PRO Gerardo Milman, a quien le atribuyen haber dicho en un bar dos días antes del ataque “cuando esté muerta yo voy a estar en la costa”.    

La pista sobre el diputado Milman fue uno de los puntos que terminó por sellar el descontento de la querella representante de CFK en torno al accionar de Capuchetti, por haber dejado pasar este detalle por alto. Cabe recordar que, tras el pedido de recusación impulsado por CFK, la magistrada decidió delegar las labores de investigación sobre la figura del fiscal Carlos Rívolo, acaso como gesto para mostrar recepción sobre la exigencia de la vicejefa de Estado.

Hasta el momento, por la causa del atentado a CFK están presos Fernando Sabag Montiel, el hombre que gatilló contra la vicepresidenta, y su novia, Brenda Uliarte, acusados de ser coautores del intento de asesinato agravado.

También está preso Nicolás Carrizo, jefe de la mentada “banda de los copitos”, procesado como partícipe secundario. CFK lo quiere también como coautor. Y a todos ellos y muchos más investigados por asociación ilícita, la misma figura que pesa sobre ella en muchas de las causas de corrupción que la tienen como acusada.

En paralelo, continúa la causa también que investiga el nexo entre el grupo de ultraderecha Revolución Federal -del que hay indicios de cercanía con Uliarte- y el ex ministro de la era Cambiemos, Luis “Toto” Caputo. La conexión llega por parte del referente de Revolución federal, Jonathan Morel, de quien se descubrieron cobros por más de 7 millones de pesos hacia la empresa Caputo Hermanos, en concepto de trabajos de “carpintería”.