
Zabaleta reconoció que hay "mucha calentura y mucha angustia" en la calle
El ministro de Desarrollo Social consideró que los dos temas más preocupan a la sociedad son la inflación y la inseguridad
El ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, se refirió a la realidad que enfrenta el gobierno de Alberto Fernández, y reconoció que en las calles "hay mucha angustia y bronca" por la situación económica que se vive. Además, vinculó la derrota electoral a dos grandes problemas: la inflación y la inseguridad.
El ex intendente de Hurlingham defendió las principales políticas que puso en marcha la gestión después de las PASO, entre las que se destacan la recomposición de los ingresos de los sectores más postergados, la conversión de los planes sociales en empleo en blanco y genuino, las negociaciones con el FMI y la puesta en marcha de una medida para frenar la escalada de los precios de los alimentos. "Nosotros venimos de un desastre económico, pero ahora el objetivo es mirar para adelante y le debemos contar a la gente hacia donde los vamos a llevar", aseguró.
En conversación con A24, el funcionario nacional dijo que "no hay que enojarse con cómo vota la gente" y señaló cuáles fueron para él los motivos detrás del resultado adverso en las elecciones PASO para el Frente de Todos. Al ser consultado sobre qué temas hay mayor malestar en la gente, Zabaleta respondió sin dudar: "Por el aumento de precios y por la inseguridad".
"Es la primera vez que el peronismo gobierna en una coalición y tiene que funcionar porque estamos obligados a dar respuesta y en cumplir las expectativas con las que nos eligió la sociedad, que hoy está en gran parte enojada, pero hay que seguir gobernando", señaló.
A su vez, en estos meses de gestión, Zabaleta reconoció que hay "mucha calentura, hay mucha angustia, hay bronca" y recordó que "se vivió una pandemia, la plata no alcanza, se perdió trabajo, los chicos estuvieron durante 16 meses en la casa, donde no todos tuvieron una tablet con un sistema de internet. Pero estoy convencido que de este lado está la salida y no mirando para atrás".
"Yo no reniego ni me enojo por cómo vota la gente, pensamos que con la vacuna alcanzaba", pero reconoció que, "cuando la abuela y el abuelo se iba feliz después de recibir la vacuna, cruzaba a la carnicería o a la verdulería y se enojaba, cuando iba al mercadito se enojaba porque los precios aumentaron".
Por otro lado, descartó que se haya "abusado" de los planes sociales y subsidios directos, debido a que "tenemos un 40,6% de pobres en Argentina". De todos modos, no dudó en cuestionar la modalidad de protesta que ponen en marcha las organizaciones sociales, con piquetes que impiden circular. "Cortar una calle no está bien. Tenemos que convencer que hay una mesa de trabajo, soluciones, un gobierno decidido a invertir en programas y generación de empleo", remarcó.