Pasado el mediodía, los trabajadores del Astillero Río Santiago se movilizaron a la tradicional intersección de 7 y 50 de La Plata para visibilizar la situación que atraviesan; exigir que los convoquen a paritarias y un aumento salarial del 30% con cláusula gatillo; y que reactiven la producción.

En conversación con Diagonales, la trabajadora y delegada gremial, Lorena Benaglia, contó que hace dos meses el gobierno de María Eugenia Vidal "intervino el Astillero" tal como fue informado en el Boletín Oficial y designaron a Daniel Capdevila, como nuevo presidente. 

Relató que la transición no fue nada amigable sino que "entraron un día de sorpresa a la gerencia y no dejaron ingresar a los gerentes anteriores porque estaban despedidos y asignó ocho gerentes propios".

El conflicto no terminó, por el contrario, la nueva autoridad "empezó a perseguir tanto a la parte gremial como a los trabajadores", dijo Benaglia quien a su vez consideró que "no vinieron a reactivar el Astillero, en realidad vinieron a echar gente"

Además, manifestó su preocupación porque "privatizaron la parte de sanidad" y porque "hay unos listados" de posibles personas a despedir y remarcó que el nuevo Presidente les dijo que "a él no le iba a temblar el pulso si tenía que despedir a alguien".

En ese marco, la delegada contó que "hoy hicimos una asamblea adentro del Astillero", luego los representantes de los trabajadores se reunieron con Capdevila "y la verdad que no tuvieron buenas respuestas más que promesas, pero nada seguro". Por eso decidieron "salir a la calle hoy porque queremos que realmente reactiven el Astillero porque está realmente paralizado". 

La manifestación también fue para pedir la reapertura de paritaria y un incremento salarial del 30% a la vez que para repudiar las privatizaciones dentro del astillero. Los gremios que representan a los trabajadores además informaron que el lunes habrá un nuevo corte en 7 y 50 y que por la tarde se concentrarán en las puertas del Ministerio de Trabajo en 7 y 38.