El ex ministro de Educación y precandidato a senador por Cambiemos, Esteban Bullrich, reavivó el debate sobre el aborto al considerar que "también es #NiUnaMenos si hay una beba adentro, porque también la estás matando". Tras sus polémicos dichos, que fueron ampliamente repudiados en las redes y por colectivos feministas, muchos precandidatos fueron interpelados mediáticamente sobre el tema.

Primero le tocó el turno al precandidato al Diputado de 1País, Felipe Solá, quien disparó: "La mujer embarazada no es dueña de su cuerpo". Luego, el ex gobernador de Buenos Aires maquilló un poco sus dichos y aclaró que "la mirada sobre la cuestión no debe ser filosófica ni religiosa sino social" y se preguntó "¿Cuántas mujeres mueren por el aborto clandestino o de bajo costo?".

Esta mañana le tocó el turno a la compañera de fórmula de Florencio Randazzo, quien cuenta con un recorrido personal en cuestiones en género. Florencia Casamiquela sostuvo en diálogo con la AM 1110  que "tenemos que avanzar en la discusión del tema, no podemos eludirlo más pero no sólo adentro del Congreso, sino puertas afuera".

Además consideró que, al igual cuando se dio el debate sobre el matrimonio igualitario, "la sociedad estaba más avanzada en la discusión del tema que la dirigencia política. Me parece que con el aborto pasa más o menos lo mismo".

Si bien reconoció que tiene "muchas contradicciones respecto de este tema", afirmó que "la respuesta del Estado ante una mujer que es humilde, joven, que recurre desesperada para interrumpir un embarazo, no puede ser la cárcel o la muerte".

Y explicó: "Es un tema que tenemos que avanzar. Socialmente se plantea desde una óptica muy hipócrita porque las clases sociales que tiene acceso a la información, que si lo desean pueden realizar un aborto seguro en una clínica con otras condiciones de salubridad, a veces esas clases se manifiestan en contra".