El Ministerio de Economía bonaerense puso en marcha esta mañana el sistema biométrico de huella dactilar para controlar la asistencia de los empleados de la dependencia y brindar "mayor seguridad". La implementación del nuevo mecanismo de ingreso generó largas colas sobre la calle 45 entre 6 y 7, donde está ubicada la puerta de acceso al edificio. 

El control de presentismo, que se puso en marcha también en la Casa de Gobierno de la Provincia y se está extendiendo a todos los ministerios bonaerenses, está vinculado a la implementación de un sistema de control para "premiar el mérito" en los empleados estatales. 

En la administración de María Eugenia Vidal resolvieron que ese monitoreo que apunta a evitar ausencias, llegadas tarde o abandono de las tareas dentro del horario laboral. Así, los empleados deberán posar el dedo pulgar sobre una máquina que registrará la asistencia y hora tanto de ingreso como de retiro. 

En ARBA, la medida generó gran polémica porque el titular del ente recaudador, Gastón Fossati, a través de la resolución 148/17 dejó sin plus por productividad a mujeres con licencia por embarazo, licencia por paternidad, adopción y duelo. La medida generó un repudio generalizado entre los empleados y Fossati debió dar marcha atrás.