Parece haberse cumplido con una de las metas prometidas durante la última campaña electoral, en la que proponía a los habitantes bonaerenses volver a relacionarse con el mundo. Pero esta "inserción" en el ámbito internacional no vino justamente de la mano de inversiones que promuevan el crecimiento del sector productivo y de la mejora de la infraestructura provincial, sino todo lo contrario vino de la mano de un fuerte endeudamiento internacional. El endeudamiento del sector público provincial durante el primero año de gestión de Vidal sufrió un fuerte incremento en comparación con la gestión sciolista.

El pago de U$S 9.500 millones los Fondos Buitres en marzo de 2016 fue el puntapié inicial para apuntalar el endeudamiento externo por parte de diferentes provincias, dentro de la cual Buenos Aires no ha quedado rezagada. Los U$S 500 millones de bonos de deuda emitidos por Daniel Scioli (durante el mes de junio de 2015) parecen haberse quedado muy lejos de los u$4.500 millones contraídos por la Gobernadora Vidal durante su aun corto mandato.

La escalada de endeudamiento externo de la gestión Vidal comenzó allá por el mes de marzo de 2016 (tras el pre-acuerdo con los fondos buitres) cuando se emitían bonos por U$S 1.250 millones bajo legislación de Nueva York. Luego de esto, la Gobernación impulsaría una segunda colocación de deuda (durante el mes de junio), esta vez por un monto de U$S 1.000 millones y bajo la misma legislación. El próximo tramo correspondió al mes de octubre del pasado año, donde la emisión de dos bonos internacionales alcanzó un monto de U$S 750 millones. La última y la más abultada deuda contraída en el mercado exterior durante la gestión provincial de Cambiemos, se dio durante el pasado 8 de febrero, en la que se emitieron dos bonos por un total de U$S 1.500 millones.

Mas allá de la lluvia de dólares "de deuda" recibidos desde el exterior, no se puede dejar de observar lo ocurrido con la deuda pública provincial. Según los últimos datos suministrados por el Ministerio de Economía bonaerense (correspondientes al tercer trimestre de 2016), la deuda pública se encuentra en $180.615 millones vs los $122.084 millones al cierre de 2015. El incremento de deuda en moneda nacional fue del 48% para los primeros 9 meses de 2016.

Por otro lado, si se comparara el endeudamiento público con la actividad económica, se puede decir que en diciembre de 2015 la relación Deuda/PBG (Producto Bruto Geográfico) era del 5,8%, y para fines de septiembre del año pasado llegaba al 6,4%. Es decir, que durante los primeros nueve meses de 2016 se incrementó en un 10% la cantidad de bienes y servicios necesarios para pagar la deuda provincial.

El camino del endeudamiento para resolver gasto corriente significa "una mochila de plomo" para aquellos que la sufran. Esta política, junto con la devaluación y quita de retenciones y la consecuencia de ello, la pérdida del poder adquisitivo de los salarios, la apertura de los mercados y el tarifazo, configuran puntales centrales del proyecto económico de Cambiemos, que apuntala ingresos sólo para los que más tienen.