El gobierno quiere avanzar con el plan de vacunación y para ello han lanzado una campaña comunicacional en la que los propios mandatarios y funcionarios de los distintos niveles de gestión ponen el hombre para ser inoculados. En la provincia de Buenos Aires, el gobernador Axel Kicillof ya recibió las dos dosis de Sputnik V y varios intendentes, tanto del oficialismo como algunos de la oposición, también se vacunaron. Ayer, tras la aprobación del uso del producto Gam-COVID-Vac en mayores de 60 años por parte de la Anmat, el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán, recibió la primera dosis; hoy lo hizo el presidente Alberto Fernández y algunos jefes comunales. 

El intendente de Berazategui, Juan José Mussi, tiene 80 años y decidió sumarse a la campaña "Vacunate".  De esta manera, fue inoculado este mismo jueves en el Hospital El Cruce "Néstor Kirchner" de Florencio Varela.  "Estaba esperando este momento y quiero decirle a la gente que tenga confianza en la vacuna porque la vacuna sirve", dijo el jefe comunal antes de ingresar al centro de salud. 

"Estoy muy esperanzado, como médico e intendente", expresó y agradeció a Fernández y a Kicillof "porque están haciendo un esfuerzo enorme para que esta pandemia nos afecte lo menos posible". Además, agradeció al Hospital y explicó que no pudo vacunar el el Hospital Evita Pueblo de Berazategui "porque ya aplicaron todas las dosis que llegaron a nuestra ciudad al personal de salud". 

"Sin lugar a dudas esta campaña de vacunación será épica, por la cantidad de gente que se vacunará en poco tiempo", agregó Mussi y pidió al resto de la población que se registre para ser inoculada contra el Covid-19. 

Otro intendente mayor de 60 años que decidió predicar con el ejemplo fue Juan Pablo Zurro del partido de Pehuajó. "Sin duda estamos dando una enorme batalla contra una pandemia que nos ha desafiado en todos los órdenes", escribió el mandatario en sus redes sociales donde publicó una foto del momento en el que recibió la primera dosis de la vacuna Sputnik V.

La Provincia de Buenos Aires prevé vacunar a un millón y medio de personas durante el mes de febrero y espera poder hacerlo entre los grupos de riesgo y aquellos ciudadanos que estén más expuestos al contagio, por ello esperan que la inoculación de intendentes, funcionarios, gobernadores y el propio Presidente, genere confianza en la población.