Horas después del feroz temporal que azotó Miramar, el gobernador Axel Kicillof se trasladó a la ciudad costera para analizar los daños y reunierse con el intendente del partido de General Alvarado, Sebastián Ianantuony.

Además de evaluar el estado de situación, el Gobernador ofreció la asistencia de la Provincia para llevar adelante el proceso de reconstrucción de la ciudad tras los daños que dejó la fuerte tormenta que dejó un saldo de dos muertos: una mujer de 84 años y un joven de 17.

“La Provincia puso a disposición todos los ministerios para asistir desde cada área”, indicó Kicillof y resaltó que existe “una línea de créditos del Banco Provincia para emergencias” como es este caso.

Además, confirmó que “está llegando un camión con asistencia” y señaló que “estas cosas llevan tiempo, sobre todo cuando son cuestiones estructurales”. En ese sentido, el mandatario provinical le garantizó al jefe comunal que su gobierno está “a disposición para ayudarlos” en lo que sea necesario.

En diálogo con la prensa, el Gobernador aprovechó para enviar un mensaje al gobierno nacional que no se hizo presente en el lugar y al igual que en Bahía Blanca, tampoco ofreció asistencia. “Los que niegan el cambio climático que vengan a Miramar. Que den un recorrido por Bahía, no una visita relámpago”, lanzó.

“Hay que dar respuesta desde el Estado, acompañamos en las buenas y en las malas. Lamentamos que hemos tenido un despliegue muy importante en educación y salud y en estos días estamos discutiendo lo que nos espera... las provincias no son una carga”, sentenció Kicillof. 

"Esperamos que no haya decisiones desfavorables que le pongan límite a las provincias cortando fondos porque tenemos que terminar las obras", añadió.