Tal como lo hicieron saber en las elecciones legislativas del año pasado, la Unión Cívica Radical busca disputarle poder al PRO dentro de Juntos por el Cambio y para ello, la provincia de Buenos Aires es una jurisdicción clave. Mañana martes, referentes nacionales y provinciales de la UCR mantendrán un encuentro, asado mediante, en la ciudad de La Plata para reforzar su armado bonaerense de cara a los comicios de 2023. 

El titular de la UCR bonaerense, Maximiliano Abad, será el anfitrión de la cumbre que tendrá lugar mañana al mediodía en la sede del Comité Provincia de Buenos Aires del partido radical. Del encuentro participará el diputado nacional,Facundo Manes; el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales; el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés; el senador nacional Luis Naidenoff; el diputado nacional Mario Negri; el dirigente Ernesto Sanz; la senadora Carolina Losada; y la diputada nacional Roxana Reyes. 

Con el respaldo de la dirigencia nacional, el radicalismo bonaerense quiere definir sus candidaturas para disputar la Gobernación en 2023, no sólo para competir con el Frente de Todos sino contra el precandidato/a del PRO.

Con ese objetivo, ya hace algunas semanas, la UCR provincial lanzó la Fundación Poder Buenos Aires, un espacio para elaborar políticas públicas que pasarán a formar parte de su plataforma de cara a las elecciones ejecutivas del próximo año.

“No improvisamos de cara al 2023. Queremos construir políticas públicas, programas de gobierno con base científicas y con especialistas por eso presentamos la Fundación Poder Buenos Aires”, afirmó Abad en la presentación de la fundación. “La UCR es un partido de poder y nos vamos a preparar para conquistar el gobierno”, resaltó. 

El radicalismo ya anunció que presentará candidatos propios tanto para Nación como para la provincia de Buenos Aires, donde gobierna en 32 de los 135 municipios. “La UCR va a tener una fórmula para gobernar la provincia de Buenos Aires”, prometió el presidente del radicalismo bonaerense. 

De todas maneras, mientras que desde el PRO ya varios dirigentes han expresado sus intenciones de competir por la gobernación, el radicalismo permanece en silencio y todavía no se habla de posibles nombres.