Las internas dentro del Frente de Todos no cesan. En medio de una creciente demanda de más políticas de asistencia a los sectores vulnerables por parte de las organizaciones sociales, el kirchnerismo vuelve a tomar distancia de las políticas económicas del equipo económico de Alberto Fernández, al mismo tiempo que cuestiona a las organizaciones sociales por "la terciarización de los planes sociales".  

Uno de los funcionarios cuestionados por las organizaciones sociales y piqueteras es el ministro de Desarrollo de la Comunidad de la provincia de Buenos Aires, Andrés “El Cuervo” Larroque, quien este martes retomó las palabras de ayer de Cristina Fernández y elevó la tensión con las agrupaciones, especialmente con el Movimiento Evita.

“Hubo un acuerdo con (Martín) Guzmán para bancar el ajuste”, lanzó el ministro bonaerense y dirigente de La Cámpora. “Yo creo que (el ajuste) contó con el visto bueno de un sector de las organizaciones, inclusive algunas que tienen funcionarios en el gobierno nacional", detalló en una entrevista en Radio 10.

Den esta manera, Larroque hizo referencia directa a dirigentes sociales y funcionarios nacionales como el secretario de Relaciones Parlamentarias, Fernando “Chino” Navarro, y el secretario de Economía Social, Emilio Pérsico (ambos del Movimiento Evita); y el subsecretario de Promoción de la Economía Social y Desarrollo local, Daniel Menéndez (Barrios de Pie). 

Y por si quedaba alguna duda, nombró directamente al Movimiento Evita, abiertamente enfrentado con La Cámpora y el kirchnerismo al respaldar a Alberto Fernández "Hubo un pacto, del Evita y muchas más, sin dudas”, afirmó el funcionario provincial. 

Larroque sostuvo que luego del con el FMI “desapareció el IFE y aumentaron los Potenciar Trabajo” y que por ello cree que “hubo un acuerdo para bancar el ajuste entre Guzmán y un sector de las organizaciones, que se beneficiaron aumentando los Potenciar Trabajo, los planes, para administrarlos, privando a la sociedad de una política de ingreso que fue exitosa por otra que tiene una dosis de discrecionalidad a la hora de asignar derechos que es cuestionable”.

Además, el ministro opinó que es necesario “tener coraje para tomar las medidas que requiere el contexto” de crisis económica. “Hubo un sector del gabinete nacional, algunos ya no forman parte, donde permanentemente se quiso llevar al Presidente a una tensión con Cristina Kirchner, inexplicable, y creo que estamos pagando las consecuencias de esa tensión, esas operaciones", señaló.

Y concluyó: “No está en discusión la unidad (del Frente de Todos), sino cómo darle contenido, sentido y una dirección o una velocidad (al gobierno) que esté a tono con las necesidades del pueblo