Hace ya algunas semanas, desde el gobierno de la provincia de Buenos Aires se habla de una reforma a Ley Impositiva que mantenga la progresividad, es decir que se apliquen mayores gravámenes a quienes más tienen. El próximo lunes, el gobernador Axel Kicillof enviará a la Legislatura un proyecto que contempla subas de impuestos en torno al 52%.

La iniciativa fue redactada por el propio Kicillof, en conjunto con los ministros de Producción, Augusto Costa, y de Economía, Pablo López; además del titular de la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (ARBA), Cristian Girard.

Ayer, durante la reunión con intendentes, el gobernador adelantó que el proyecto de Ley Fiscal 2022 tiene por objetivo recuperar la inflación acumulada durante el último año, por eso se estima un aumento impositivo del 52%. 

Sin embargo, en función de la pretendida progresividad, remarcó que es necesario “limitar las alzas” que impacten en los sectores de ingresos medios y bajos.

La iniciativa que entrará la semana que viene a la Legislatura, mantiene beneficios destinados a pymes, empresas y autónomos que integran los sectores más afectados por la pandemia, como también las bonificaciones en Ingresos Brutos, la reducción de alícuotas y los planes de pago.

El escenario en la Legislatura no le será fácil. Luego del 10 de diciembre, el Frente de Todos retrocederá de 45 diputados a 41 mientras que Juntos pasará de 38 a 41. Además, en la Cámara Baja, la izquierda tiene dos bancas y Avanza Libertad, tres. Las negociaciones serán claves.