Durante el informe epidemiológico que brindó ayer el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, junto al ministro de Salud Daniel Gollan, la Provincia informó que 59 municipios se encontraban en la fase 2 del aislamiento social, preventivo y obligatorio. Sin embargo, en menos de 24 horas, otros dos distritos retrocedieron de fase y se suman al listado de los que se encuentran en la etapa más restrictiva.

Este miércoles, Florentino Ameghino y Carlos Casares anunciaron que bajaron a fase 2 por un “pico en la curva de contagios” y ya son 61 los municipios bonaerenses que se encuentran en la misma situación con restricciones a la circulación, limitaciones horarias al comercio y la suspensión de las clases presenciales, entre otras medidas destinadas a  bajar la cantidad de contagios. 

En el caso de Ameghino, la noticia fue comunicada por el intendente de Juntos por el Cambio, Calixto Tellechea, quien aseguró que "hace varias semanas venimos atravesando un aumento de casos que nos preocupa y ocupa” y se refirió específicamente a la suspensión de las clases presenciales: "La prioridad es que los chicos estén en las aulas, pero la urgencia es controlar la situación sanitaria por lo que acompañamos esta decisión provincial”.

Con 190 casos de coronavirus activos en una población de poco más de 7.000 habitantes, el intendente opositor se alejó de la postura inflexible que mantenía Juntos por el Cambio sobre la presencialidad en las escuelas y reconoció que la medida era necesaria.

Tellechea explicó que en su distrito, a pesar de las medidas de restricción de la fase 3, el “crecimiento de los casos de Covid-19” siguió en ascenso y que con el pase de fase “mantener la situación bajo control”.

Por su parte, el municipio de Carlos Casares también acordó pasar a fase 2  luego de que el partido alcanzara los 195 casos activos. Incluso el gobernador Axel Kicillof suspendió una visita que tenía programada a ese distrito para este miércoles.

En una entrevista con la radio Centro 100.7, el director del hospital casarense, Wilson Ramseyer, indicó que “la terapia intensiva está ocupada en un 80% por pacientes Covid” y que “el personal está extremadamente agotado”.