El municipio de Lomas de Zamora fue el escenario de un peculiar jornada política, ya que allí aterrizaron, por separado y sin cruzarse, tres nombres que perfilan como posibles futuros gobernadores de la Provincia. Se trata de la actual gobernadora, María Eugenia Vidal, el intendente Martín Insaurralde y el empresario y conductor de TV, Marcelo Tinelli, quien se asoma cada vez más en el terreno electoral de cara a este año.

Las tres figuras pisaron el populoso distrito del sur del Conurbano, donde dieron vía libre a actividades de campaña con referentes locales. Insaurralde, de local, se reunió con Veteranos de Malvinas de esa ciudad y por la noche presentó la Fundación Salud Lomas.

En tanto, con un perfil más bajo, Vidal recorrió un jardín de infantes de la ciudad acompañado por los ministros Santiago López Medrano y Carolina Stanley. En uno de los bastiones de voto peronista en la Tercera, las aspiraciones de Cambiemos son austeras.

Por su parte, Tinelli decidió dirigirse a la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, donde mantuvo una reunión con el rector Diego Molea, quien también es miembro del Consejo de la Magistratura de la Nación. El día anterior, el conductor televisivo se reunió con el intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk, quien recibió críticas por el “coqueteo” que el alcalde comenzó a mostrar con el peronismo del medio de Alternativa Federal.

Es que Tinelli, de manera reciente amparado por Roberto Lavagna, envía señales diversas a distintos lugares. Mientras se reúne con Sujarchuk y se gana el visto bueno de Lavagna, intercambia gestos amistosos con el kirchnerista Axel Kicillof vía twitter. Con la ventaja de ser la figura “outsider” de la grieta partidaria, Tinelli le sube cada vez más la apuesta a su perfil político y parece apostar al territorio bonaerense. No obstante, su reunión con el cuestionado alcalde de Escobar le valió el rechazo de Insaurralde, quien decidió eludir la visita del conductor de ShowMatch en su ciudad natal.