Un peronismo de fiesta de la mano de Axel Kicillof: el interior del búnker de Fuerza Patria
Una jornada que comenzó con un optimismo cauteloso terminó por convertirse en una gran fiesta callejera, que tuvo al Gobernador como el protagonista de un domingo histórico para el justicialismo
Durante los días previos a la elección legislativa de la provincia de Buenos Aires, en el peronismo hablaban de un empate técnico. Los más optimistas esperaban una victoria por 2 o 3 puntos. Ninguno se imaginaba que la diferencia sería de 13 puntos y que el triunfo de Fuerza Patria sería contundente. Lo cierto es que ese mismo domingo, incluso antes de que cerraran las urnas, cerca de las 17 horas, ya se respiraba un mayor optimismo en el búnker de FP.
El lugar elegido fue el Hotel Grand Brizzo, ubicado en 10 y 51, en pleno corazón platense. En esa misma esquina, como un vaticinio de lo que pasaría al día siguiente, el sábado a la noche Fuerza Patria armó un escenario sobre la calle para recibir a la militancia con música en vivo, Djs, streaming y un acto que encabezaría el propio Axel Kicillof tras el cierre de la jornada electoral.
El domingo, poco después de las cinco de la tarde, los alrededores del Hotel Gran Brizzo comenzaron a llenarse de militantes, bombos, trompetas y banderas argentinas que colmaron calle 51. Desde temprano se respiraba el optimismo en el aire.
De todas maneras, nadie quería adelantar nada sin tener resultados y números concretos. Tal fue así, que los dirigentes no aparecieron ante la prensa acreditada hasta las 20 horas. Mientras tanto, en off, los voceros transmitían alegría pero cautelosa. Ninguno quería cantar victoria antes de que se confirmara la tendencia, que de todas maneras ya veían aplastante.
Finalmente, minutos antes de las 20, el director del Banco Provincia Sebastián Galmarini fue el encargado de confirmar “un triunfo bastante importante” en la sala de conferencias del búnker. “Tenemos que esperar hasta las 21, pero ya tenemos resultados provisorios y podemos confirmar que es un triunfo de Fuerza Patria”, adelantó el funcionario.
Para entonces, afuera en la calle, cientos de militantes agitaban banderas argentinas y bailaban cumbia al ritmo de Gilda. La cautela había desaparecido y la fiesta del peronismo estaba comenzado.
Una hora después, con el 82,22% de las mesas escrutadas para las 21 horas, Carlos Bianco confirmó, desde el centro de computos, ubicado en Monte Grande (Esteban Echeverría), que Fuerza Patria había ganado en 6 de las 8 secciones electorales y en un total de 99 municipios. El discurso del ministro de Gobierno fue trasnmitido en tres pantalles gigantes, que estaban sobre el escenario plantado en el centro platense.
Bianco no había terminado de detallar los porcentajes cuando estallaron gritos de alegría, los bombos y las trompetas entre la milancia que se había reunido en las puertas del Gran Brizzo. La noche era fría, pero entre la muchedumbre reunida alrededor del búnker de Fuerza Patria hacía calor.
Mientras tanto, adentro del hotel, se reunían cada vez más dirigentes. Temprano, estaba el gobernador Axel Kicillof con sus ministros. También estaban legisladores provinciales y nacionales del Movimiento Derecho al Futuro, el cristinismo y el Frente Renovador. Pasadas las 19 horas, llegó el propio Sergio Massa y cerca de las 22 horas varios intendentes de diferentes sectores del peronismo como Fernando Espinoza, Jorge Ferraresi, Mario Secco, Fabián Cagliardi, Mayra Mendoza, entre otros.
También estuvo presente Juan Grabois y referentes de su espacio, dirigentes del sindicalismo bonaerense y nacional, entre ellos uno de los miembros del triunvirato de la CGT, Héctor Daer.
Lo cierto es que las internas del peronismo no quedaron resueltas ni mucho menos. Más bien, todo lo contrario, pero ello no impidió que ayer todos se subieran al escenario con Axel Kicillof. Nadie quiso quedarse afuera de la foto ganadora, excepto una persona: Máximo Kirchner. La Cámpora estuvo presente en el búnker y en el acto de cierre, pero su principal dirigente pegó el faltazo.
En cambio, Kirchner recibió los resultados en el departamento de San José 1111, en la ciudad de Buenos Aires, donde Cristina Fernández cumple con su prisión domiciliaria. Por su parte, la ex presidenta grabó un mensaje para felicitar a todos los candidatos, dirigentes y militancia de Fuerza Patria.
El audio fue transmitido desde en el búnker de 10 y 51, y las palabras de la ex mandataria fueron recibidas con aplausos arriba y abajo del escenario. Sin embargo, el protagonista de la noche fue Axel Kicillof.
“Axel, conducción” y “Axel, presidente”, fueron dos cánticos que resonaron fuerte en la noche platense. Es que el Gobernador fue el gran protagonista de la jornada, no solamente por derrotar a Javier Milei sino por posicionarse como una de las principales figuras con mayor peso dentro del peronismo.
Desde Gobernación decían semanas atrás que “Axel es la campaña”. Y efectivamente, así fue. Por ese motivo, después de este domingo 7 de septiembre, Kicillof se erigió como el gran ganador de la elección sin ser candidato y cerró el acto de Fuerza Patria como único orador, arriba de un escenario colmado de dirigentes.
Tras la victoria, desde el kicillofismo aseguraban anoche que no estaban pensando en 2027, pero el discurso del Gobernador tuvo un perfil complementamente presidenciable y con un mensaje que traspasó las fronteras de la provincia de Buenos Aires. “Este es un triunfo de los bonaerenses para todo el país y del peronismo para todos los argentinos”, exclamó el mandatario.
“Ganamos esta elección sumando fuerzas y gobernando tanto la Provincia como los municipios únicamente en favor de los y las bonaerenses: ese es nuestro compromiso y el camino por el que vamos a seguir. Con esta elección, vengo a decirles que se confirmó que en la Argentina hay otro camino y hoy empezamos a recorrerlo”, añadió.
Además de canciones de respaldo a Axel Kicillof, en el aire sonó la marcha peronista y el himno nacional; ambos cantados a todo pulmón por todos los presentes.
Finalizado el acto, la fiesta de la militancia continuaba al ritmo de los bombos y las trompetas. Adentro, el gobernador, sus ministros y los dirgientes de todo el peronismo que se habían acercado compartieron una cena de celebración a puertas cerradas. Mientras tanto, Carlos Bianco, quien ya había regresado de Monte Grande, seguía hablando con los pocos medios de comunicación que habían quedado en la sala de conferencia.
“El peronismo venía golpeado con derrotas en varias provincias últimamente. Me parece que haber ganado en la provincia más grande de la Argentina es una buena señal de que el peronismo sigue vivo, tiene algo para decir, tiene algo para mostrar y tiene un nuevo camino para ir construyendo la esperanza del pueblo argentino”, afirmó el ministro de Gobierno en conversación con Diagonales y, sin decirlo explícitamente, deslizó un mensaje de cara a 2027.
Lo cierto es que desde las 5 de la tarde del domingo, el búnker de Fuerza Patria en La Plata fue una verdadera fiesta para el peronismo, una fiesta que como hace tiempo no tenía, que revivó su esperanza hacia el 2027 y que tuvo a Axel Kicillof como protagonista.