El 80 por ciento de la deuda de la provincia de Buenos Aires se encuentra nominada en dólares. El alza en el precio de la divisa tiene impacto directo en las cuentas públicas. Los compromisos por servicios de deuda pautados para este año fueron calculados con un dólar a 40 pesos lo que explica la necesidad de endeudarse para pagar los vencimientos. La devaluación, que supera el 12 por ciento en lo que va del año, coloca a la Provincia al borde del default. 

“Si bien el cálculo en el presupuesto se hizo con un dólar de 40 pesos, el BCRA vende dólar futuro a casi 60 pesos. Entonces la pregunta correcta es cómo va a hacer Maria Eugenia Vidal para sostener el pago de intereses con un tipo de cambio de 59 pesos”, aclara Silvina Batakis, ex ministra de economía de la provincia de Buenos Aires. 

Dado el contexto, y como manotazo de ahogado, el gabinete económico reanudó las negociaciones con los principales bancos extranjeros para concretar una nueva colocación de deuda en condiciones poco favorables. Se baraja la modalidad repo, donde son las mismas entidades financieras las que venden deuda soberana con el compromiso de re comprarla en una fecha determinada. Si los bancos funcionan como garantes es porque el deudor no genera la confianza suficiente.

“El riesgo de default de la provincia de Buenos Aires es de 1000 puntos básicos”, afirma Mercedes La Gioisa, miembro del equipo económico del PJ provincial. 

Según el ministro de economía bonaerense, Hernan Lacunza, la deuda es para " financiar la ejecución de proyectos, programas sociales, de inversión pública, atender el déficit financiero, regularizar atrasos de Tesorería, afrontar la cancelación y/o renegociación de deudas y de los servicios de deudas, como así también tender a mejorar el perfil de vencimientos y las condiciones financieras de la deuda pública", tal como lo afirmó cuando mandó a la legislatura, junto al presupuesto 2019, un pedido de endeudamiento por una cifra aproximada a los setenta mil millones de pesos.

Sin embargo, al ver los números, el resultado no cierra. La dinámica económica es un poco más compleja que los balances de una planilla Excel. El inicio del 2019 mostró un grado de recaudación del Estado Nacional sensiblemente por debajo de la inflación, producto de la caída en la actividad. Así y todo los intereses del pago de deuda pública del primer bimestre superaron los fondos destinados a la salud pública.

Con la devaluación -responsabilidad de la política macroeconómica del gobierno nacional del cual forman parte- María Eugenia Vidal y su equipo entran en crisis porque saben que la Provincia queda al borde del default. La plata no alcanza siquiera para cumplir con los compromisos por servicios de deuda asumidos para este año, monto que supera los 1600 mil millones de dólares y 256 millones, lo que equivale al doble de lo destinado a Asistencia Social,siete veces a Vivienda y Urbanismo y dieciséis veces lo que se imparte a Industria, según se consigna en el último informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda, definiciones traslucidas sobre la dirección política  del modelo económico del gobierno. 

La política de endeudamiento de la provincia constituye el eje principal del presupuesto. “El presupuesto de la Provincia deBuenos Aires es el fiel reflejo del ajuste general, instrumentado en el marco del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional”, analiza el informe de la UNDAV. El problema es que con un dólar en escalada, no hay ajuste que garantice el pago de la deuda.