El caso de Santiago Maldonado conmocionó a la opinión pública y en masa, la población salió a las calles a pedir por su aparición antes de que fuera encontrado sin vida en el Río Chubut 78 días después de la represión policial. Un de los gendarmes que participó de aquel operativo en la ruta de Esquel fue el subalférez, Emmanuel Echazú que señaló que si el joven muerto "se hubiera entregado, lo habríamos aprehendido y puesto a disposición de la Justicia" y que por lo tanto "estaría vivo”.

A Clarín, el gendarme perteneciente al Escuadrón 36 de El Bolsón salió a contar su versión y a intentar aclarar lo sucedido, en un caso que dejó muchas dudas, a pesar de que los peritos coincidieron en que el cuerpo de Maldonado permaneció en el agua, no fue arrastrado y no presentaba lesiones que se correspondan con golpes.

"Si lo hubiéramos visto ahogándose, lo habríamos auxiliado", indicó Echazú, a la vez que relató que fue golpeado por una piedra y que eso es el motivo de la herida en que se lo ve en las fotografías. “Siento el impacto y no sentía que estaba sangrando. Me toco y estaba sangrando”, dijo y agregó: “En el momento la situación era bastante tensa, el clima era adverso. Por la adrenalina no lo sentí”.

 “Siento el impacto y no sentía que estaba sangrando. Me toco y estaba sangrando”

Al momento de dar detalle del momento en que persiguen a los manifestantes, el gendarme aseguró que “cuando llegué al río no veía a ninguno. No podía ver a ninguno. Hay ramas, una vegetación muy tupida”. Algo que generó dudas es que no recuerda momentos. Por ejemplo, cuando dijo que “no sé qué me pasó” al momento de regresar del río, el subalférez asegura que no tiene registro. “Quizás lo habré dicho, pero no lo recuerdo", dice a Clarín.

Finalmente, sobre el accionar, Echazú agregó: “Para mí fue un procedimiento habitual, normal”. Y sobre cruzar el Río a nado, señaló que él “No lo hubiera hecho, no hubiera cruzado. Es peligroso, más para el que no conoce la zona. Tiene sus características particulares”.