El Fiscal federal Ramiro González tomó la determinación de imputar al ex jefe de la Agencia de Inteligencia, Oscar Parrilli y a su entonces segundo, Juan Martín Mena, a raíz de una escucha telefónica en la que refieren sobre un presunto tráfico de influencias para con el juez federal Sebastián Casanello.

Se trata de una escucha entre Parrilli y Mena, en donde uno de los hombres de máxima confianza de Cristina Fernández de Kirchner (Parrilli) le pide que interceda con sus contactos ante Casanello para evitar que éste procesara al ex jefe de la AFIP Ricardo Echegaray en la causa por lavado de dinero por la cual está detenido el empresario Lázaro Báez.

En la conversación difundida en el programa TN Central, Parrilli le pide a Mena que hable con el ex secretario de Justicia Julián Álvarez para que este a su vez lo haga con Casanello.

Además, en una charla previa, entre Parrilli y Echegaray, el primero le dice al ex jefe de la AFIP que se quede tranquilo, ya que Casanello "es flojito y presionable".

Cabe recordar que Parrilli tenía el teléfono intervenido en la investigación por inacción en la detención del empresario prófugo Ibar Pérez Corradi, causa por la que fue procesado la semana pasada.